Según la documentación aportada por la lírica griega arcaica, la carne es el elemento esencial y central de la comida diaria asociada también a los banquetes y los sacrificios, siendo las carnes de cerdo y, en particular, de buey el eje central de la dieta. Junto a ellos se consume de manera generalizada la oveja y el cabrito. La caza constituía una fuente importante de proteínas en la dieta: el jabalí y la liebre, recomendada para comer en otoño. Otros productos de origen animal serían la leche y sus derivados, la mantequilla y el queso de Acaya, elaborado éste con leche de cabra.
Por otra parte, en la Grecia arcaica el pescado era considerado como un alimento indigno que sólo se comía cuando no había otra cosa disponible. Pero, en cambio, en la época clásica fue un producto de cierta importancia en la dieta mediterránea. Las especies capturadas que citan los textos líricos son el verrugato, la corvina y también el atún. Se menciona un plato cuya base es la hembra del atún, elaborado con una salsa a base de ajo, queso y miel o huevo machacados en un mortero. Otro pescado apreciado en la dieta era la angula; la del río Meandro era famosa por su excelente calidad, pero la que se buscaba con mayor empeño para ser cocinada era la del lago Copias en Boecia. Otro tipo de pescados utilizados eran: el gobio y el chucleto, cocinados al fuego y a las brasas.
Entre los moluscos que se ingerían estaban la sepia, el calamar y una especie de bivalvo tipo almeja, y entre los crustáceos se encontraban el cangrejo y la gamba, aunque esta última no se ha podido identificar con claridad, puesto que algunos autores la denominan camarón o quisquilla, y se debía servir frita o asada.
La dieta mediterránea de los griegos estaba compuesta también por una gran abundancia de cereales y legumbres. Dentro de los cereales que se consumían estaban el trigo y la cebada, con diversas aplicaciones en la cocina griega. El pan era elaborado con harina de trigo, aunque era igualmente fabricado con cebada, y en algunos textos se nombra como “el forraje para los caballos”. Con la cebada se realizaba un alimento sencillo, como unas gachas o algún tipo de torta de forma espiral, siendo el centro principal de la comida diaria en época arcaica. Otro alimento elaborado con harina de cebada era una especie de bebida hecha con algún líquido (miel, agua, aceite o vino), queso y diferentes hierbas aromáticas (poleo, tomillo y menta), muy apreciada por sus cualidades nutritivas y medicinales, y utilizada en algunos actos culturales y rituales. Se realizaban también panes de sémola, aunque eran de una calidad inferior. Como dulce se hace referencia a los panes dulces y a los pasteles con una forma plana.
Desde época antigua los griegos contaban en su dieta alimentaria con la presencia de legumbres aunque las considerasen alimentos de muy baja calidad. Entre ellas destacan dos: las lentejas y los garbanzos. También se menciona una especie de puré de legumbres, que en algún momento aparece asociado a las habas y los guisantes. Entre las comidas diarias había una realizada a base de lentejas, carente de lujos pero muy apreciada. Los garbanzos se consumían tostados, acompañados con vino, como aperitivo o como postre.
Los condimentos necesarios para la elaboración de los diversos platos eran: el sésamo (de origen asiático, cuya función principal era la de aromatizar la masa del pan y los pasteles), la granada (empleada principalmente en la elaboración de postres) o el zumaque (cuyos frutos se comían preparados en vinagre antes de su maduración, como las alcaparras).
Fuente:
Mediterráneo: Fenicia, Grecia y Roma – Pilar Pardo Mata
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Y a todo esto usando aceite de oliva. Parece ser que fueron los griegos los que lo trajeron a nuestra península.
ResponderEliminarUn saludo.
Desde luego una dieta Mediterránea muy rica en carnes y no tanto en pescado. Muy interesante.
ResponderEliminarUn saludo.
Interesante post. como siempre. ademas a estas hora te hace abrir el apetito... je je.
ResponderEliminarUn saludo.
Por lo que veo es una dieta muy equilibrada, pero... quería hacerte una pregunta porque me asalta una duda después de haber leido el texto, ¿Cuál es la causa de que considerasen impuro el pescado?
ResponderEliminarUn saludo y gracias por tu tiempo.
Emilio, no era impuro sino indigno. Supongo que era comida "de pobres".
ResponderEliminarHecho en falta algo de verdura para acabar de equilibrar la dieta.
ResponderEliminarUn saludo.