El Conde-Duque de Olivares a Caballo (Velázquez) |
Gaspar de Guzmán y Pimentel, más conocido como el Conde-Duque de Olivares, nació en Roma, donde su padre era embajador, el 6 de enero de 1587. Su padre, Enrique de Guzmán, conde de Olivares, estaba emparentado con la casa de Medina-Sidonia, grandes de España, aunque él no poseía este título. Su madre fue doña María de Pimentel y Fonseca.
De joven realizó estudios eclesiásticos en la Universidad de Salamanca, llegando a ser nombrado rector por sus compañeros en 1603. Dejó los estudios cuando sus hermanos mayores fallecieron y acudió a la corte con su padre. Al fallecer éste en 1607, se hizo cargo del mayorazgo y recibió el título nobiliario perteneciente a su padre.
Se estableció en Sevilla, donde se dedicó al mecenazgo de artistas. Contrajo matrimonio con Isabel de Velasco, dama de honor de la reina Margarita, lo cual le abrió las puertas del círculo cortesano, y en 1615 ingresó en la corte al servicio del futuro rey Felipe IV.
Protegido por su tío Baltasar de Zúñiga fue ganando poder y prestigio, ganándose el favor del futuro rey y observando la caída en desgracia del duque de Lerma y de los Sandoval, hechos que aprovechó para sus propios fines.
En 1621, siendo ya Felipe IV rey, es nombrado sumiller de corps y un año más tarde se le nombraba caballerizo mayor, puestos desde los que obtiene un poderoso control sobre la corte. Ya en 1623, durante la visita del príncipe de Gales aparece como valido del rey, cargo que obtiene mediante favores, regalos e intrigas, y después de una encarnizada lucha con otras facciones. El cargo de valido le proporcionó una gran fortuna, consiguiendo extensos territorios, rentas y títulos.
Felipe IV de España (Velázquez) |
España se encontraba entonces inmersa en una gran crisis. La monarquía había perdido el poder que tuviera en el pasado y se habían ido perdiendo territorios en el continente europeo. Por ello, Olivares decidió poner en marcha el Gran Memorial, un programa centrado en tratar de recuperar el poder de la monarquía y concentrarlo en la figura del propio valido. Consistía en reorganizar el uso de los recursos para que todos los territorios sufragaran por igual los gastos, y no únicamente Castilla como venía sucediendo. Esto se haría mediante la Unión de Armas.
Las reformas no funcionaron debido a la oposición que se encontró en los diferentes territorios del reino. Por este motivo hubo que endeudarse para pagar la guerra de Flandes. En 1627 se produjo la bancarrota.
En 1629 tuvieron lugar los Sucesos de Mantua, que permitieron al Conde-Duque ejercer el poder de forma autoritaria. Así, durante los siguientes cinco años puso en práctica un gran programa de reformas. Sin embargo, tuvo que ponerles fin al romper las relaciones con Francia.
Debido a su mal gobierno estuvo a punto de ser depuesto en varias ocasiones, pero su don de gentes le permitió conservar el cargo. La victoria de Fuenterrabía le ayudó a mantenerse en su puesto, pero esto supuso un daño aún mayor a las arcas reales. Esto provocó el descontento entre la población y el levantamiento del pueblo catalán. Además, se produjo la separación del reino de Portugal en 1640. Finalmente, en 1643 Felipe IV decidió destituirle. Se retiró a Loeches para pasar sus últimos años y falleció el 22 de julio de 1645 en la localidad de Toro.
Fuentes:
* http://redhistoria.com/biografia-del-conde-duque-de-olivares/#.V26tmriLSUk
* http://www.artehistoria.com/v2/personajes/6250.htm
* http://www.phistoria.net/reportajes-de-historia/EL-CONDE-DUQUE-DE-OLIVARES-&-SU-EPOCA_98.html
Inteligente, capaz, soberbio, prepotente, arrogante, colérico... Velázquez supo caracterizarle muy bien en el célebre retrato ecuestre que se conserva en el Museo del Prado. Nada se movía en el reino, ni una hoja, sin que él lo supiera. Le llevaban los demonios que un picaruelo rey se le escapara por ahí para irse de picos pardos. Metió la pata en asuntos de estado, como es habitual entre nuestros gobernantes. Y pagó por ello.
ResponderEliminarUn saludo.