30 de octubre de 2009

Leonardo Da Vinci

Leonardo nació en 1452 a las afueras de la aldea italiana de Vinci. Su nombre proclama su procedencia. Era hijo natural, lo que condicionaría su existencia. El ser bastardo le privó de aprender griego y latín, lenguas en las que estaban escritos todos los libros de su tiempo, pero él hizo de esto una ventaja. Su carencia de formación académica tuvo otro efecto. Dado que nadie lo había corregido escribía con la mano izquierda, y lo que es más misterioso: al revés, lo que podría ser un signo temprano de lo hermético que llegaría a ser. Leonardo se crió explorando la campiña que circundaba Vinci. Su curiosidad por el mundo natural era inagotable y lo estudiaba. Le obsesionaban el movimiento del agua, los ciclos de crecimiento de las plantas, el comportamiento de los seres vivos, y, sobre todo, las maravillas del vuelo. Durante toda su vida observó el vuelo de las aves, las dibujó compulsivamente y comenzó a establecer los principios de la aerodinámica. Una de las mayores obsesiones de su vida fue construir un aparato que permitiese volar al hombre. Conocemos los pensamientos que ocupaban su mente gracias a sus escritos. Nos legó 6.000 páginas de bocetos y notas, algunas de las cuales se encuentran recopiladas en cuadernos. El más conocido de los ingenios que Leonardo concibió para volar es el llamado 'ornitóptero', que esencialmente consiste en un hombre batiendo un par de alas. Aunque parece bastante excéntrico, entre sus dibujos hay algunos que podrían funcionar.
Ornitóptero
La despreocupada infancia de Leonardo concluyó a comienzos de la década de 1460, cuando su padre lo sacó de su casa de Vinci y se lo llevó a Florencia. Para un niño de la Toscana debía ser un lugar extraordinario. Florencia era el centro del Renacimiento. Durante la vida de Leonardo, Gütenberg imprimiría el primer libro y Cristóbal Colón descubriría el Nuevo Mundo. No obstante, el Renacimiento fue una era de conflictos y encarnizada violencia. La vida podía ser breve y brutal. La violencia de su época provocaba en él sentimientos encontrados, pero a pesar de ello inventó armas y máquinas de guerra para algunos de los peores tiranos de entonces. Leonardo ensalzaba las virtudes de la paz, mas contribuyó al desarrollo del arte bélico. Su padre lo mandó a Florencia a encontrar trabajo. Dada su condición de hijo ilegítimo, Da Vinci no podía aspirar a hacerse médico o abogado. Su padre esperaba que llegase a ser artista, y lo colocó de aprendiz en el taller de Andrea del Verrocchio, uno de los mejores escultores y artesanos de la época. El aprendizaje de Leonardo duró varios años. Se crió en el estudio del maestro y se empeñó en crear obras maestras.
Andrea del Verrocchio
Con veintipocos años tuvo por fin su oportunidad. Verrocchio había recibido un importante encargo, un "bautismo de Cristo". El maestro pintó las figuras principales y dejó los personajes secundarios para sus ayudantes. A Leonardo le encomendó el ángel de la izquierda. Su trabajo dejó tan atónitos a sus compañeros como a su propio maestro, el gran Verrocchio. Pero cuando la carrera de Leonardo comenzaba a despegar, se vio envuelto en un escándalo sexual que a punto estuvo de coatarle la vida. Es muy posible que Leonardo fuese homosexual. Sin duda alguna, le obsesionaba el desnudo masculino y le placía la compañía de jóvenes hermosos. En Florencia la homosexualidad era ilegal y se castigaba con la muerte. En las murallas de la ciudad se encontraban las famosas 'vocce della verità', las bocas de la verdad. Los ciudadanos que deseasen verter acusaciones anónimas contra sus vecinos podían depositarlas allí, y en abril de 1476 uno de estos delatores acusó a Leonardo de sodomía. Leonardo pasó varias semanas de zozobra mientras se recopilaban pruebas contra él. Por una cuestión de buena suerte, uno de sus amigos resultó ser el hijo de un poderoso noble, lo que probablemente contribuyó a que recibiese una condena muy liviana. Fue absuelto a cambio de recibir una pequeña paliza. En 1482, a la edad de 30 años, hizo el equipaje inopinadamente, se marchó de Florencia y se dirigió a otra importante urbe: MIlán. El duque de Milán era Ludovico Sforza, uno de los tiranos más temidos y odiados de toda Italia. Leonardo llegó al castillo de los Sforza con la esperanza de caerles en gracia. Sin embargo tuvo que andarse con sumo cuidado. Ludovico 'el moro' era un snob que se había rodeado de genealogistas y astrólogos, así como del acostumbrado grupo de artistas e ingenieros. Era tan peligroso como iluso. Encargó un árbol genealógico que debía rastrear los orígenes de su estirpe, no ya hasta la realeza sino hasta los propios dioses.
Ludovico Sforza
Como a cualquier otro gobernante renacentista, al duque le interesaban sobre todo las máquinas de guerra. Leonardo apeló tanto a su vanidad como a sus necesidades militares. El duque lo contrató pero no como ingeniero militar. Empezó a trabajar por un magro sueldo inferior al del bufón de la corte, a cambio de proyectar el drenaje del baño de la duquesa y la instalación de un sistema de calefacción central. También se le encomendó la organización de las celebraciones del duque. Se encargaba de diseñar las máscaras, los disfraces y los artefactos mecánicos que hacían las delicias de los convidados. Pero Leonardo tenía mayores ambiciones que limitarse a satisfacer los triviales caprichos del duque. Tanto en su etapa milanesa como durante el resto de su vida trabajó también por cuenta propia, ampliando los límites de la ciencia y realizando descubrimientos en una portentosa variedad de ámbitos.
Hombre de Vitruvio
Durante los años que pasó en Milán dio rienda suelta a su imaginación y realizó algunos descubrimientos notables. Fue uno de los primeros en investigar cómo ven nuestros ojos. Concibió colosales obras de ingeniería y mecánica. Ideó máquinas para excavar grandes extensiones de terreno. Desarrolló nuevos métodos agrícolas de irrigación y un amplio abanico de ingenios bélicos. Concluyó que la luz se refleja en unas minúsculas partículas de la atmósfera y que por eso el cielo es azul. Estudió el cuerpo humano y con el tiempo descubriría que el endurecimiento de las arterias provoca enfermedades cardíacas y la muerte. Durante su estancia en Milán, Leonardo tomó como aprendiz a un muchacho llamado Giacomo Caprotti. Según sus propias palabras, el primer día el chico le robó dinero, comió con desenfreno y rompió varios objetos, por lo que lo apodó 'Salai' (pequeño diablo). Era totalmente indulgente con el chico, de dudosa reputación, pero perdonable y encantador. Salai ocupa el espacio emocional más importante de la vida de Leonardo. Leonardo logró finalizar un par de pinturas importantes: 'La Virgen de las Rocas' y el retrato de una amante del duque, 'La dama del armiño', una de las obras cumbre del retrato renacentista. En sus cuadernos hay planos de ingeniosas y temibles máquinas de guerra, como una gigantesca ballesta. Ideó una enorme guadaña concebida para cortar las piernas de los enemigos. Pero quizá su proyecto más enigmático sea lo que parece ser un precursor del tanque, que no se inventó hasta la I Guerra Mundial. En 1495, Da Vinci llevaba trece años trabajando para Ludovico Sforza. Pese a la informalidad de Leonardo el duque decidió confiarle un importante encargo. Le pidió que pintase una "última cena" para el refectorio del convento de Santa María de las Gracias. Se trataba de un tema pintado en numerosas ocasiones, pero Leonardo lo haría de un modo muy diferente. Se le ocurrió captar la reacción de los discípulos en el momento en que Jesús les decía: "uno de vosotros me traicionará". Unos años después de terminada la obra, bajo su superficie empezaron a aparecer unas grietas casi imperceptibles. Bajo el yeso afloraba la humedad causando daños. No obstante, la obra aún conserca parte de su fuerza original. En la frontera se concentraban millares de soldados franceses preparados para invadir Milán. Al cabo de pocos meses, Leonardo huiría de la ciudad y se vería obligado a trabajar para unos señores a cuyo lado Ludovico Sforza era un santo. Habría asimismo conflictos con el nuevo Papa, y su fama de ser el más célebre pintor de Italia se vería desafiada por un émulo que le odiaba y le despreciaba: un rival llamado Miguel Ángel. En 1502 conoce a Caterina Sforza, que según algunos pudo ser la modelo de 'La Gioconda', pintura ejecutada en 1503 y que se ha convertido en el cuadro más famoso del mundo. Leonardo Da Vinci falleció el 2 de mayo de 1519 en el castillo de Clos Lucé (Francia) y fue enterrado en la capilla de Saint Hubert, en el castillo de Amboise.

4 comentarios :

  1. Uno de los más grandes personajes de la historia de la humanidad. Lleno de incógnitas y misterios.
    Saludos

    ResponderEliminar
  2. Pocos personajes tan fascinantes como Leonardo -tal vez Miguel Ángel- ha dado la historia. Artista completo, gran diseñador, adelantado de su tiempo.
    Y ese halo de misterio que envuelve alguna de sus obras y que traes aquí, como La Gioconda o La última cena, que a tanta literatura ha dado lugar.
    Saludos.

    ResponderEliminar
  3. Hola, mi nombre es Ascesino96, y en mi blog, damos la posibilidad de que tu blog se registre y que mucha gente lo conosca. Aqui tienes la posibilidad de ofreser tu blog a los buscadores y que mucha gente lo conosca y que tu pagerank suba. Para suscribirte haz click aqui

    ResponderEliminar
  4. Gran entrada! Leonardo da tema para varios posts, es increíble! Aunque sobre la rivalidad con Miguel Ángel, me quedo con el último, es mi preferido. :)

    Ya no existen personajes así, tan grandes, que dominan tanto la anatomía, como la pintura, como que te inventaban un artilugio para volar... eran superhombres.

    ResponderEliminar

Gracias por tu comentario.

Creative Commons License
Paseando Por la Historia está bajo una licencia Creative Commons Reconocimiento-No comercial 3.0 España.