29 de junio de 2009
La muerte de Enrique II de Francia
Enrique II de Francia fue rey de Francia perteneciente a la Casa de Valois (Saint-Germain-en-Laye, 1519 - París, 1559). Heredó el Trono de su padre, Francisco I, en 1547.
En 1559, con motivo de la boda de su hija Isabel con Felipe II de España, participó en un torneo y en uno de los combates, el 30 de junio de 1559, se enfrentó contra Gabriel, Conde de Montgomery, con la mala suerte de ser gravemente herido. Un relato dice:
"En la primera carrera, ambos jinetes rompieron sus lanzas pero se sostuvieron sobre las monturas a pesar del ímpetu del encuentro. Cambió el rey su lanza y sorprendentemente, contra todas las normas, el conde de Montgomery, distraído, conservó el fragmento del asta rota en sus manos. En el segundo choque, esta parte de la lanza resbaló en la coraza del rey, y levantando la visera, le alcanzó la parte superior del rostro, entre las dos cejas".
Mal herido, se recurrió a los mejores médicos y cirujanos para tratar de salvarle la vida. Felipe II envió a Andrés Vesalio, el más afamado médico de la época y entonces la máxima autoridad entre los cirujanos.
Había, no obstante, que diagnosticar la magnitud de los daños padecidos para, a partir de él, emplear el tratamiento mejor. Y el diagnóstico se llevó a cabo de la siguiente horripilante manera: Como obviamente no había en esos añejos tiempos ningún aparato de rayos X que permitiera ver el estado del cerebro, se utilizó a cuatro prisioneros del Grand Chastelet, a quienes en plena salud se les incrustó una estaca de una manera parecida a como había sido herido el rey. Todos murieron. Una vez muertos, se analizó detenidamente la lesión producida para darse una idea los médicos de la magnitud del daño sufrido por el su majestad. De nada sirvió, porque la herida era impresionante. Así que como era de preverse, Enrique II sufrió un coma y murió a los diez días.
Le sucedió su hijo mayor Francisco II de Francia.
Suscribirse a:
Enviar comentarios
(
Atom
)
África
América
Antigüedad
Antiguo Egipto
Arqueología
Arquitectura
Arte
Aztecas
Barroco
Batallas
Bizancio
Blogs
Cartago
Castillos
Celtas
China
Ciencia
Colonización de América
Curiosidades
Edad Media
Edad Moderna
EEUU
El porqué de las cosas
Era Vikinga
Faraones
Fenicia
Filosofía
Franquismo
Godos
Grecia
Guerra Civil Española
Historia Contemporánea
Historia de Catalunya
Historia de España
Historia en imágenes
Hunos
I Guerra Mundial
Iberia
II Guerra Mundial
Imperio Mongol
Imperio Napoleónico
Imperio Otomano
Imperio Persa
Incas
Inventos
Japón
Las Cruzadas
Libros
Literatura
Mayas
Mesopotamia
Monumentos
Noticias
Novela Histórica
Oeste Americano
Oficios antiguos
Oriente
Personajes Históricos
Piratas
Prehistoria
Premios
Pueblos Indígenas
Religión
Renacimiento
Revolución Francesa
Roma
Vídeos
Paseando Por la Historia está bajo una licencia Creative Commons Reconocimiento-No comercial 3.0 España.
Joer qué bestias.
ResponderEliminarFue una agonía tremenda, de lo peor que se pueda imaginar. Por eso a veces lo mas terrible no es la muerte, sino cómo se produce.
ResponderEliminarAy, mire que lo previno Nostradamus!
Debio hacerle mas caso.
Bisous, madame
Me temo que estás confundiendo a Enrique II con Francisco II, su hijo, quien murió de Otitis... Según lo que recuerdo, Nostradamus previno la muerte de Francisco.
EliminarA mí me dan pena los presos "voluntarios" para hacer prácticas antes de meterle mano al Rey... muy fuerte.
ResponderEliminarY sí! Efectivamente, lo predijo Nostradamus!
Sí, por lo visto se le incrutó una gran astilla en el ojo. Qué horror!!! Y entonces no había penicilina, ni nada contra el dolor y la fiebre, ni puntos de sutura. Ni para un campesino ni para el rey.
ResponderEliminarBesos
Hola maravilloso volver aquí, estoy de visita, felicitaciones por el hermoso trabajo, excelente. Gracias! Quien está acompañado por un amigo va más allá, ciertamente mucho más allá ...
ResponderEliminarCompartir el texto siguiente
"La amistad es como esta:
Se siente el amor,
Oímos la llamada.
¿Sabes el tiempo
a permanecer en silencio.
La amistad es añadido
felicidad, tristeza dividir.
Respetamos el espacio,
en silencio los secretos.
Y la certeza
la mano extendida.
La complicidad que
no se puede explicar,
Sólo vivir! " O. Roberto
Gracias de corazón por su atención y amabilidad. Espero una semana llena de muchos logros, muchas bendiciones y que reine la paz, y la protección de la salud, siempre brille! Godspeed. Nos reuniremos siempre aquí. ¡Salud!.
Valdemir Reis
Si, Nostradamus basó todo su prestigio en esta profecía. ¡Qué pena de voluntarios!.
ResponderEliminarPor cierto, ¿qué fue del conde?
Hola Azahara. Gracias por la visita. Veo que tienes un blog muy interesante que voy a seguir. Te leo con más calma mañana con todas estas magníficas entradas que has hecho.
ResponderEliminarsaludos
Xibelius, pues a mí también me da curiosidad el conde... pero no encontré nada sobre el tema...
ResponderEliminarMoisés, gracias por pasarte! En este blog colaboro, pero lo creó y lleva el mayor peso mi amiga Kassiopea. :)
Azahara no te quites méritos.
ResponderEliminarEso no eran medicos eran carniceros
ResponderEliminarLo raro es que al conde no le hicieran nada.
ResponderEliminarAl Conde lo mandó decapitar Catalina de M{edicis en 1574. Esperó pacientemente para vengarse la gordita
ResponderEliminarHola ^^ Me gusta tu blog..? Y bien ^^ Puedes mirar tambien mi bloog? http://tinathecat-tinathecat.blogspot.com/ Espeero k te guste :D Si te gusta, podrias ser tambien mi seguidor ^^ Gracias
ResponderEliminar