La moda romana

Hombres La toga era la prenda oficial de un hombre romano. Normalmente se trataba de una pieza de tela cara de fina lana blanca. Era necesario limpiarla con frecuencia. La pieza tenía forma semicircular y era tarea complicada enrollarla alrededor del cuerpo. Varios emperadores tuvieron que promulgar edictos ordenando su uso en actos públicos.

Existían diferentes tipos de togas y se usaba una u otra dependiendo del rango social: - Toga praetexta: Utilizada por los magistrados y también por los niños hasta los 15-16 años. Se caracterizaba por tener una franja púrpura. - Toga virilis: La toga normal que utilizaba cualquier ciudadano corriente. Se empezaba a usar a los 15-16 años. - Toga picta: De color carmesí bordada en oro. La llevaban los generales y los emperadores en los desfiles triunfales. - Toga cándida: Hecha de un tejido muy brillante, la usaban personas que estaban compitiendo por un cargo público. - Toga pulla: Era de lana negra y se usaba en los funerales. Sin embargo, la base de la vestimenta masculina era la túnica de manga corta o sin mangas (la manga larga se consideraba afeminada), que se sujetaba a la cintura con un cinturón. La dalmática era una túnica de manga corta hecha de lana, lino o seda y la utilizaban las personas de posición más elevada. Más tarde se usó como prenda eclesiástica. También utilizaban capas de lana o cuero a veces con capucha. En los principios del Imperio estaban de moda las barbas pero fue una moda que acabó pronto. Mujeres En los primeros tiempos del Imperio las mujeres también llevaban toga, pero pronto su uso quedó limitado a las prostitutas y a las mujeres de mala reputación. Por lo tanto, las mujeres romanas vestían túnicas. Las casadas usaban una stola sobre la túnica, cuyo borde se ajustaba con una tira alrededor del cuello o bien se sujetaba en el hombro con un broche, que era considerado el principal adorno de una mujer romana. También usaban la llamada palla que no era otra cosa que un largo chal de lana.

El cabello lo podían llevar teñido de rojo o negro. Las peluqueras utilizaban hábilmente un rizador de hierro y eran expertas en el manejo de las tijeras. También se usaban aceites y tónicos para estimular el crecimiento y proporcionar suavidad y brillo. A principios del siglo II se hicieron populares los peinados de trenzas y a mediados de ese mismo siglo se puso de moda el cabello rubio. Se importaban pelucas negras de la India y rubias de Germania.

En cuanto al maquillaje, las mujeres romanas se aplicaban en la cara una mezcla de polvo de tiza y plomo. El color rojizo para las mejillas y los labios lo obtenían de los posos del vino. Las cejas y pestañas las llevaban ennegrecidas con cenizas o polvos de antimonio. El calzado Se acostumbraban a utilizar diversos tipos de calzado de cuero y botas, así como una gran variedad de sandalias. En invierno a menudo se llevaban suelas de corcho. Las mujeres no acostumbraban a usar medias, pero si era necesario se enrollaban tiras de lana en las piernas.